La Orquesta Sinfónica de Euskadi, bajo la dirección de Carlo Rizzi, se nos descuelga con un estreno que invita a la reflexión: ‘Eresoinka’, de la getxotarra Isabel Urrutia, mi brillante tocaya compositora. Profesora de armonía, contrapunto, historia de la orquestación y técnicas de composición en Musikene (Centro Superior de Música del País Vasco), con sede en San Sebastián, es una profesional que nunca ha descuidado su vertiente creativa.

Ganadora en 2007 del concurso que organiza la Asociación Española de Orquestas Sinfónicas con su pieza ‘Gerok’, volvió a colgarse una medalla en 2012 al vencer en el certamen ‘Grazyna Bacewicz’ que se celebra en Polonia. Es una compositora de prestigio internacional, conocida lo mismo en el Teatro Colón de Buenos Aires que en el Conservatorio Chaikovski de Moscú. En esta ocasión la OSE abordará en primacia la interpretación de una pieza de Urrutia que rinde tributo a Eresoinka, una masa coral de 110 hombres y mujeres que apenas tuvo un rodaje de dos años, entre 1937 y 1939. Se cumplen 75 años de su disolución.